Al menos diez muertos y más de 24.000 hectáreas quemadas es el saldo provisional de los incendios que afectan el valle de Sonoma y el de Napa, en California, informaron hoy autoridades locales.

Al menos siete personas murieron en el condado de Sonoma, según confirmaron las autoridades a última hora del lunes. Otras dos personas fallecieron en el condado de Napa y una más en el condado de Mendocino, informó la Dpa.

Además, hay dos heridos graves en Mendocino, indica un comunicado oficial. En esta zona, unos 400 bomberos combaten las llamas que ya consumieron más de 4.000 hectáreas.


Al menos 17 focos más de incendio se contabilizaron en otros condados del estado. Las llamas destruyeron más de 1.500 viviendas y oficinas comerciales.

El incendio que consume el área comprendida entre Santa Rosa y Calistoga comenzó afectando a 81 hectáreas y se expandió tan rápido durante la jornada que llegó a quemar más de 10.000, según los bomberos.

Otro foco que se expandió rápidamente fue el del condado de Napa, donde se procedió a la evacuación de varios vecindarios para evitar víctimas moraltes.


El gobernador de California, Jerry Brown, declaró el estado de emergencia, lo que permite destinar mayores recursos humanos al combate de las llamas, incluyendo a los efectivos de la Guardia Nacional.

Las condiciones climáticas extremas, caracterizadas por altas temperaturas y fuertes vientos, difultaban la tarea de los bomberos para contener las llamas.